A todos aquellos amantes de la adrenalina y los deportes de riesgo, los invito a que den un paseo por la UBA. ¡Sea por mi colegio secundario o por la sede de mi facultad! ¿Para qué pagar $300 para tirarse de un helicóptero con paracaídas cuando nuestra universidad pública y gratuita para todos, nos permite pasearnos por los pasillos de cualquier sede, evitando goteras, caída de techos o mampostería? Me pregunto cómo sobreviviría La Patria que figura semi desnuda en el escudo de la universidad, en un aula sin gas para calefaccionarla del Carlos Pellegrini o de Ciencias Sociales.